ROBO DE ANIMALES EN FRONTERA CON ARGENTINA
Familias de Butalelbún solicitaron intervención de cancillería en caso de robo de ganado en frontera con Argentina.
Las familias de la comunidad de Butalelbún solicitan mediante una carta enviada a la Presidenta Michelle Bachelet la intervención de la Cancillería debido al robo de ganado del que fueron objeto cuando sus animales se encontraban en las veranadas de Chanchocó, los que habrían sido sacrificados posteriormente en territorio argentino, poniendo de manifiesto los antecedentes de tal echo que fue registrado el mes de marzo en Chanchuco limite con la República de Argentina, lugar que ancestralmente es ocupado para la actividad de pastoreo de animales en épocas estivales. “Estas actividades constituyen parte esencial de nuestra cultura y permiten además el desarrollo de nuestra economía familiar”, señala en la carta Juana Rebolledo Manquepi, una de las vecinas afectadas.
El documento también fue enviado a la Intendenta María Angélica Fuentes y al Gobernador Esteban Krause, según informó el concejal Félix Tranamil, quien calificó de muy grave la situación, por lo que considera necesaria la intervención de las autoridades respectivas, ya que esta situación podría agravarse llegando a generar en un conflicto internacional si no se toman las medidas pertinentes.
Solicitan realizar las investigaciones sobre los hechos, “porque creemos que nuestros intereses son tan importantes como la de cualquier otro ciudadano de este país”, con el fin de evitar futuras complicaciones en las relaciones internacionales y revisar los procedimientos de las instituciones encargadas de vigilar las fronteras, la seguridad nacional y desde el punto de vista fitosanitario. Además solicitan a la presidenta Bachelet que pueda facultar al ministerio correspondiente con el fin de poder restituirles económicamente el daño ocasionado, con una reposición de los animales sacrificados y demandan que su territorio considerado zona limítrofe, alcance a ser beneficiado con las aperturas e integraciones económicas, que se firman y acuerdan a nivel de gobierno central.
En la ocasión fueron sustraídos 28 vacunos en lo que acusan de “forma ilegal por ciudadanos argentinos desde las veranadas, los que habrían sido trasladados inmediatamente al territorio del país vecino, sin ninguna circunstancia que justificase esta acción delictiva, que atenta con nuestros intereses económicos, además de una evidente violación al territorio nacional”.
Según informaciones extraoficiales, el ganado habría sido sacrificado en su totalidad, situación que a juicio de los comuneros pehuenches “constituye una gran molestia e impotencia para nosotros que vemos como nuestro capital económico ha desaparecido y lo más grave, es que no encontramos los medios legales y políticos donde canalizar nuestras demandas y menos pensar en una posible restitución de nuestros animales”.
Los/as afectados señalan que tal hecho respondería a una represalia producto de lo sucedido en los primeros días de febrero “donde el SAG, sacrificó animales argentinos utilizando el mismo procedimiento, en nuestra comunidad”. Tal suceso fue denunciado por gendarmería argentina a carabineros de la avanzada de Trapa Trapa, sobre animales ingresados a territorio chileno, los que fueron sacrificados posteriormente por el SAG, para evitar cualquier contagio de fiebre aftosa.
Familias de Butalelbún solicitaron intervención de cancillería en caso de robo de ganado en frontera con Argentina.
Las familias de la comunidad de Butalelbún solicitan mediante una carta enviada a la Presidenta Michelle Bachelet la intervención de la Cancillería debido al robo de ganado del que fueron objeto cuando sus animales se encontraban en las veranadas de Chanchocó, los que habrían sido sacrificados posteriormente en territorio argentino, poniendo de manifiesto los antecedentes de tal echo que fue registrado el mes de marzo en Chanchuco limite con la República de Argentina, lugar que ancestralmente es ocupado para la actividad de pastoreo de animales en épocas estivales. “Estas actividades constituyen parte esencial de nuestra cultura y permiten además el desarrollo de nuestra economía familiar”, señala en la carta Juana Rebolledo Manquepi, una de las vecinas afectadas.
El documento también fue enviado a la Intendenta María Angélica Fuentes y al Gobernador Esteban Krause, según informó el concejal Félix Tranamil, quien calificó de muy grave la situación, por lo que considera necesaria la intervención de las autoridades respectivas, ya que esta situación podría agravarse llegando a generar en un conflicto internacional si no se toman las medidas pertinentes.
Solicitan realizar las investigaciones sobre los hechos, “porque creemos que nuestros intereses son tan importantes como la de cualquier otro ciudadano de este país”, con el fin de evitar futuras complicaciones en las relaciones internacionales y revisar los procedimientos de las instituciones encargadas de vigilar las fronteras, la seguridad nacional y desde el punto de vista fitosanitario. Además solicitan a la presidenta Bachelet que pueda facultar al ministerio correspondiente con el fin de poder restituirles económicamente el daño ocasionado, con una reposición de los animales sacrificados y demandan que su territorio considerado zona limítrofe, alcance a ser beneficiado con las aperturas e integraciones económicas, que se firman y acuerdan a nivel de gobierno central.
En la ocasión fueron sustraídos 28 vacunos en lo que acusan de “forma ilegal por ciudadanos argentinos desde las veranadas, los que habrían sido trasladados inmediatamente al territorio del país vecino, sin ninguna circunstancia que justificase esta acción delictiva, que atenta con nuestros intereses económicos, además de una evidente violación al territorio nacional”.
Según informaciones extraoficiales, el ganado habría sido sacrificado en su totalidad, situación que a juicio de los comuneros pehuenches “constituye una gran molestia e impotencia para nosotros que vemos como nuestro capital económico ha desaparecido y lo más grave, es que no encontramos los medios legales y políticos donde canalizar nuestras demandas y menos pensar en una posible restitución de nuestros animales”.
Los/as afectados señalan que tal hecho respondería a una represalia producto de lo sucedido en los primeros días de febrero “donde el SAG, sacrificó animales argentinos utilizando el mismo procedimiento, en nuestra comunidad”. Tal suceso fue denunciado por gendarmería argentina a carabineros de la avanzada de Trapa Trapa, sobre animales ingresados a territorio chileno, los que fueron sacrificados posteriormente por el SAG, para evitar cualquier contagio de fiebre aftosa.
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